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La coronación del rey Carlos III y la reina Camila fue un evento histórico que reunió a más de 2 mil invitados en la abadía de Westminster en Reino Unido.
Entre las principales royals que deslumbraron a la prensa con sus looks se encuentran Rania de Jordania, Charlene de Mónaco, Letizia de España y Máxima de los Países Bajos.
Rania de Jordania, quien en compañía del rey Abdalá II lucieron de lo más elegantes. La reina consorte con un vestido en color amarillo de manga larga y un sombrero del mismo tono.
Rania de Jordania, de 52 años, es una de las consortes con mejor estilo. Hace unas semanas, su hija Imán tuvo una fastuosa boda y próximamente su hijo Hussein Abdalá llegará al altar.
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Letizia de España fue otra de las royals que se robó todas las miradas al lucir impecable en un conjunto de color rosa mientras sujetaba al rey Felipe VI del brazo.
Los reyes de España aparecen en la coronación días después de la controversia por la posible hija desconocida del rey emérito Juan Carlos I, misma que ha negado categóricamente.
(EFE)
En las últimas semanas los rumores han perseguido a Charlene de Mónaco y al príncipe Alberto, sin embargo, lejos de tranquilizar con su presencia en la coronación de Carlos III, la pareja despierta las alarmas al lucir gestos tristes.
Particularme la princesa Charlene, de 45 años, quien a su llegada a la abadía de Westminster tenía un gesto triste y caminaba cabizbaja.
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Akishino, príncipe heredero de Japón y la princesa Kiko Kawashima también llegaron a la abadía de Westminster para representar al emperador Naruhito, quien es hermano de Akishino y por protocolo normalmente no asiste a este tipo de eventos.
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La reina Máxima y el rey Guillermo Alejandro de Holanda probablemente son uno de los matrimonios reales que intentan mantenerse lejos de las polémicas. Ambos lucieron elegantes con atuendos en colores neutros.
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Otra de las royals que llamó la atención fue la princesa Victoria, quien acudió junto a su papá, el rey Carlos Gustavo de Suecia, probablemente en un intento de demostrar que su relación sigue intacta pese a los desafortunados comentarios del monarca.
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