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Fue en agosto de este año cuand se dio a conocer la repentina muerte de la nieta de Robert F. Kennedy, Saoirse Kennedy Hill, a los 22 años. Los primeros reportes señalaron que la causa de muerte fue por una sobredosis accidental, versión que se confirmaría más tarde.
De acuerdo con The Boston Globe, en el certificado de defunción puesto a disposición de la prensa se informó que Saoirse tenía alcohol y una combinación de drogas como diazepam, fluoxetina, metadona, nordiazepam y norfluoxetina en su cuerpo al momento de su muerte.
Saoirse Kennedy Hill, hija de Courtney Kennedy Hill y Paul Hill , fue encontrada sin vida el pasado 1 de agosto en la casa de su abuela Ethel Kennedy, un complejo familiar famoso ubicado en Massachusetts. Fue llevada a un hospital cercano, donde fue declarada muerta.
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Cabe señalar que Saoirse Kennedy Hill escribió un ensayo sobre la importancia de la salud mental cuando aún era una estudiante de secundaria, en 2016.
“La gente habla sobre el cáncer libremente; ¿por qué es tan difícil discutir los efectos de la depresión, -bipolar-, la ansiedad o los trastornos esquizofrénicos? ”, escribió. "El hecho de que la enfermedad no sea visible no significa que la persona que la padece no esté luchando".
Tras su muerte, las condolencias y mensajes por parte de su seres queridos se hicieron presentes a través de distintas redes sociales, algunos de ellos hablaron sobre su fortaleza y su sed de justicia.
"Saoirse era feroz, tanto por su amor por su familia como por anhelar justicia", escribió su tío Robert F. Kennedy Jr. en Instagram.
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