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La vida de los duques de Sussex está por cambiar, pues con la llegada de su primogénito podrían mudarse al continente africano por dos o tres años para estrechar los lazos entre el Reino Unido y los países de dicha región.
De acuerdo con Sunday Times, Meghan Markle y el príncipe Harry serán trasladados a un país de África en 2020 como parte de una medida para frenar los deseos de la pareja de emanciparse poco a poco de la familia real.
Sir David Manning, exembajador británico en los Estados Unidos y asesor de William y Harry en cuando a los asuntos internacionales, es quien propuso esta medida para controlar a los duques de Sussex y, además, aprovechar su imagen para realizar tareas diplomáticas como labores humanitarias.
Según el medio inglés, el exsecretario privado de la reina Isabel II, Lord Christopher Geidt, también está involucrado en esta medida cuya finalidad también es que Meghan y Harry se alejen de toda la presión mediática y puedan relajarse un poco alejados de los eventos de la realeza.
En un principio se especulaba que los duques de Sussex podrían ser enviados a Canadá o Nueva Zelanda, pero finalmente África parece ser el lugar indicado debido a la conexión que siente el príncipe con el continente y lo considera como su segunda casa, ya que, tras la muerte de su mamá, Lady Di en 1997, viajó allí en compañía de su hermano, el príncipe William.
Años más tarde, Harry se fue por un año a Lesotho y durante el verano de 2016 y 2017, viajó a Botswana con Meghan Markle. Se piensa que fue durante esas aventuras que el duque de Sussex se enamoró perdidamente de su ahora esposa.
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Hasta el momento, no ha habido un pronunciamiento oficial por parte del palacio de Buckingham.