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Froilán, hijo de la infanta Elena y Jaime de Marichalar, vuelve a encender las alarmas de preocupación en su familia tras pasar casi 72 horas de fiesta en su regreso a España.
El nieto del rey emérito Juan Carlos de España es conocido por su afición a las fiestas y meterse en problemas, hace unas semanas estuvo involucrado en una situación de violencia que puso tensa a toda su familia.
Después de dicho percance, la revista "Lecturas" informó que Froilán, de 24 años, había partido a Abu Dabi con su abuelo, Juan Carlos I de España, donde vive desde agosto de 2020, aparentemente por decisión de su mamá, la infanta Elena.
Sin embargo, parece que Felipe Juan Froilán de Todos los Santos de Marichalar y Borbón no pudo aguantar más su deseo de salir de fiesta y regreso a España para pasar unos días con sus amigos.
Las 72 horas de fiesta del joven, a quien en redes sociales apodan como 'Froilán de Todos los Antros', comenzaron la noche del pasado jueves 2 de febrero con una cena, la cual se extendió a un viernes de copas.
El punto más álgido de su fin de semana ocurrió el sábado 4 de febrero cuando acudió a una fiesta clandestina, según la revista "Semana", reunión que terminaría hasta el domingo en un ambiente más relajado.
Aunque no se sabe con exactitud las cantidades de dinero que el nieto de Juan Carlos I de España invirtió en sus 72 horas de fiesta, en uno de los lugares a los que acudió los tragos cuestan entre 500 y 1,500 euros, es decir, entre 10 mil y 100 mil pesos.
(Twitter)
Según informa la misma revista española, una de las fiestas de Froilán fue interrumpida por la policía, quien entró al lugar para inspeccionar por aparentes denuncias de estupefacientes, permitir el ingreso a menores de edad, entre otras.
Por supuesto, la familia de Froilán de Todos los Santos se encuentra con la preocupación al máximo, especialmente por sus amistades y la conexión que maneja con personas de reputación dudosa y que acuden a dichas fiestas con frecuencia.
Antes de su intenso fin de semana, el joven de 24 años también se reunió con su hermana Victoria Federica de Marichalar y Borbón, para almorzar en un lujoso restaurante bar llamado "El Doble".