En el Moxi, dentro del hotel Matilda, en San Miguel Allende, se llevó a cabo la 10a. edición de la ya tradicional 'cena negra', con el director del hotel, Bruce James, como anfitrión, acompañado de Maggie Arias, su mano derecha, quienes trabajan incansablemente para hacer esta celebración que conmemora el Día de Muertos, mejor y mejor cada año. En esta ocasión, prácticamente todos los invitados, 140 de ellos, siguieron el dress code y acudieron con espectaculares disfraces de catrinas y catrines a disfrutar del menú preparado por las chefs Gaby Ruiz, de Carmela y Sal, y Fernanda Prado, a cargo de los sensacionales postres. El menú consistió en Ensalada de lentejas con hongos, Ceviche con recado negro, Molote de plátano acompañado con mole preparado en luna llena y Short rib braseado. Por su parte, Fernanda Prado creó una flor de cempasúchil de crema de vainilla rellena de incienso y naranja con bizcocho de almendras y calabaza. En esta ocasión en la cena también se pudo bailar y prácticamente todos los asistentes aprovecharon la pista. Otra versión de la 'cena negra' será llevada a cabo en Nueva York, pero ésta será para 250 personas, con prácticamente el mismo menú creado por las chefs, esto gracias a los organizadores y a Casa Dragones, la exclusiva firma tequilera, ubicada en San Miguel, que siempre participa en este evento.

Los chefs Marcela Bolaño, de Marsala, y Donnie Masterton, de The Restaurant, estuvieron como invitados en la cocina de Moxi, el restaurante del conocido hotel Matilda, en San Miguel Allende, para ofrecer una cena con tema erótico en la que, además de delicias afrodisiacas y estupendos vinos, hubo múltiples elementos que hacían referencia a la materia a tratar como plumas negras, antifaces, esposas flexibles y mucho más. La cena se complementó con una exposición de obras de la galería Óscar Román que permanecerá en exhibición durante un mes. El menú de seis tiempos incluyó delicias como Dúo sensual de mariscos, Codornices en pétalos de rosa, y el postre 9 1/2 semanas, con base en plátanos congelados, canoli y mucho chocolate. La divertida cena hizo las delicias de los invitados, que lo pasaron increíble.