Mari Rouss Villegas, presidenta de la Fundación MGAS, y varias de sus voluntarias, fueron anfitrionas de Friends and Flowers, un brunch y taller floral para festejar a las mamás. Además del delicioso menú mañanero creado por el chef Raúl Valencia del restaurante Pehüa, las mamás presentes disfrutaron de coctelería de Casa Dragones e hicieron cada una un arreglo floral de rosas y orquídeas con la guía de Cynthia Ángeles y Alexandra Solana de Flower School, así como de Dora Rico, de Las Flores Chulas. "El 17 de mayo reiniciaremos nuestras cirugías, después de que durante un año y medio de pandemia no pudimos traer a los médicos de Rusia, así que este es nuestro último evento antes de retomar nuestras jornadas" comentó Mari Rouss a CLASE. Fundación MGAS se dedica a recaudar fondos para ayudar a niños y niñas de escasos recursos que sufren de parálisis cerebral, a ser intervenidos quirúrgicamente por médicos rusos con el método Ulzibat, el cual contribuye a controlar la espasticidad provocada por esta condición. La fundación también busca ayudar a las familias con lo necesario para que el pequeño pueda ser operado exitosamente.

La Fundación MGAS, que se dedica a gestionar cirugías con el método Ulzibat para pequeños con parálisis cerebral espástica y de escasos recursos, llevó a cabo --previa prueba Covid a todos los asistentes, sumada a todas las medidas sanitarias de prevención contra el contagio-- una cena y subasta con el tema del surrealismo en el arte, con el objetivo de recaudar fondos para su causa. Numerosos objetos intervenidos, obras de arte y recuerdos personales donados por celebridades fueron subastados, entre ellos un par de zapatillas de ballet de Elisa Carrillo, guantes de box de Julio César Chávez, botellas intervenidas de cognac Louis XIII, un piano intervenido y mucho más. La periodista Paola Rojas fue la encargada de motivar a los asistentes durante la subasta, acompañando a la presidenta de la fundación, Mari Rouss Villegas. La invitada de honor fue Gabriela Rejón de Joaquín, presidenta del DIF de Quintana Roo. Xavier Seres y sus hijas, Natalia y Fernanda, fueron los pujadores más entusiastas de la noche y quienes se llevaron varias de las obras a casa. En la parte artística de la noche, se llevó a cabo un performance en el que la bailarina Sofía Alcaraz bailó con la música de Las Gnossienes, de Satie, al piano, mientras que la artista Ana Lucía Tejeda derramaba pintura sobre su cuerpo. La cena fue ofrecida por los restaurantes Sepia y Pehua de Israel González, miembro del patronato de MGAS. La noche fue un gran éxito para la fundación y su labor benéfica.