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La popularidad y el carisma que la princesa Diana llevó al palacio de Buckingham y a la familia real pudo no ser del agrado de todos sus miembros, especialmente del príncipe Carlos, quien habría tratado de boicotear su imagen a través de la moda. Debido a que Lady Di era una fan de las tendencias y las prendas, su esposo vio ahí una oportunidad para socavarla.
De acuerdo con Elizabeth Holmes, quien acaba de lanzar el libro "HRH: So Many Thoughts on Royal Style", el hijo de la reina Isabel II hizo todo lo posible para desviar la atención que su joven esposa había adquirido desde su noviazgo.
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La autora confesó a la revista People: "La atención que recibió Diana fue sorprendente para la familia real y luego una fuente de resentimiento. Para Carlos, se puede decir en sus comentarios públicos, la moda es una de las cosas que trató de usar contra ella. (Usó el) interés de Diana en la moda para pintarla como superficial o frívola", sentenció.
Elizabeth Holmes trabajó como periodista de negocios y moda para The Wall Street Journal y entrevistó a un gran número de diseñadores a lo largo de varios años, pero fue en su serie de Instagram "So Many Thoughts", como se dedicó a analizar más a fondo el estilo de vestir de la familia real.
De acuerdo con el libro, el diseñador Jasper Conrad dijo que Diana siempre se preocupaba de que su esposo la viera sexy. "La pregunta siempre era: '¿Mi esposo pensará que soy sexy en esto?'".
"En el fondo, creo que quería la atención de Carlos, por eso, muchos de sus conjuntos, especialmente a finales de los 80, parecen gritar: 'Mírame'", explicó Holmes a People. "El ejemplo más famoso es su vestido de venganza que usó la noche que se emitió el documental en el que Carlos admitió que le había sido infiel".
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