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Desde hace unos días, Nicole Kidman y Keith Urban han acaparado los titulares debido al anuncio de su separación tras 19 años de matrimonio.
La historia de amor que comenzó en 2006 llega a su fin en medio de una serie de polémicas que abarcan desde una supuesta infidelidad, acuerdos financieros, la cláusula de cocaína y la custodia de sus hijas.

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Durante el verano comenzaron las especulaciones sobre una posible separación, ya que se decía que Nicole y Keith vivían en casas distintas.
Finalmente, el pasado 30 de septiembre los abogados de la intérprete de 'Ojos bien cerrados', presentaron la demanda de divorcio que contiene todos los detalles acerca de los acuerdos a los que llegó la expareja.
Aunque el documento oficial señala 'dificultades maritales y diferencias irreconciliables', los rumores apuntan a situaciones más complejas.

¿Por qué se divorcian Nicole Kidman y Keith Urban?
Una supuesta infidelidad
Aunque aún nada es claro, los seguidores de ambos señalan una supuesta infidelidad por parte de Keith Urban.
Incluso se le ha vinculado con la guitarrista de su propia banda, Maggie Baugh, luego de que él modificara en un concierto la letra de la canción 'The Fighter', originalmente escrita para Nicole Kidman, sustituyendo su nombre por el de la joven.
Cabe destacar que el video donde el Keith pronuncia el nombre de la guitarrista en vez del de Nicole, fue publicado por la misma Maggie en su cuenta de Instagram.

Este gesto causó indignación entre el público, que en su mayoría se ha puesto del lado de la actriz, recordando el apoyo que ella le brindó al cantante en sus luchas contra las adicciones.
La cláusula de la cocaína
Otro de los retos a los que se ha enfrentado la pareja tiene que ver con un acuerdo prenupcial que firmaron en 2006 para proteger a Keith del consumo de la cocaína.

Dicha cláusula estipulaba que por cada año que Keith se mantuviera sobrio, recibiría 600.000 dólares de Nicole. Por lo que, ahora, el cantante de country podría recibir hasta 11 millones de dólares (10,20 millones de euros) solo gracias a este acuerdo.
La custodia de sus hijas
En cuanto a la custodia de sus hijas, Sunday Rose, de 17 años, y Faith Margaret, de 14, se estableció vivirán con Nicole por 306 días al año, mientras que Urban podrá estar con ellas 59 días.

El acuerdo detalla cómo se dividirán fines de semana y vacaciones. Por ejemplo, en Navidad, Nicole tendrá a sus hijas en los años impares, mientras que en Acción de Gracias la custodia se alternará cada año.
Además, ambos se comprometieron a fomentar una buena relación de las niñas con cada uno, así como tomar cursos de crianza para padres divorciados durante los dos meses posteriores a la firma del contrato.
Acuerdo financiero
Gracias a que Nicole y Keith mantienen sus finanzas separadas, el tema económico resultó menos complicado. No habrá pensión entre ellos ni para sus hijas.

Sin embargo, Keith ya había cubierto por adelantado gastos relacionados con la educación, actividades extracurriculares y niñeras hasta que sus hijas alcancen la mayoría de edad.
Así también quedó estipulado que ninguno de los dos podrá reclamar dinero, propiedades o cuentas en el futuro del otro.
El fin de una historia de casi 20 años
Con una demanda de divorcio tan detallada, de la cual hasta hace unos días se supo, se sospecha que el trato ya venía tiempo negociándose.
Y, aunque todo parece estar legalmente resuelto, fuentes cercanas revelaron a la revista 'People' que Nicole Kidman intentó salvar el matrimonio, pero quedó herida y shock al ver que Keith Urban decidió seguir adelante sin mirar atrás.

También han surgido detalles de la relación, como que Nicole no siempre contó con el apoyo de Keith en su carrera, siendo su madre quien la motivó a no abandonar el cine.
Así, mientras siguen apareciendo nuevas revelaciones, lo cierto es que Nicole Kidman y Keith Urban ponen punto final a lo que alguna vez fue una historia de amor hace 19 años.
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