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Mientras que los mexicanos perdieron a un candidato presidencial, él se quedó sin su padre. Aunque se muestra un poco reacio a hablar sobre el tema, el hijo de Luis Donaldo Colosio Murrieta, Luis Donaldo Rioja nos recibe en su despacho, en Monterrey, para platicar sobre sobre cómo recuerda a sus padres, quienes fallecieron con ocho meses de diferencia, su vida con su esposa, María de la Luz García, y sus hijos Luis Donaldo y María Emilia.
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Luis Donaldo recuerda cuando su padre firmó como candidato y que el político bromeó con él sobre si debía hacerlo. “No eran muy frecuentes, pero eran muy nuestros”, dice sobre este momento.
El primer hijo de la pareja los describe como un matrimonio muy afectivo y como una muy buena fórmula.
“Tierna, muy amorosa, muy entregada a su rol de madre y esposa”, es como el joven político recuerda a su madre, quien aparece aquí en 1994 junto a sus dos hijos.
Luis Donaldo y Mariana en un homenaje a su mamá Diana Laura, en noviembre de 2004.
Aunque el excandidato presidencial era una persona seria, su hijo asegura que, con su familia, era cariñoso.
Luis Donaldo y Mariana con sus primos que se convirtieron en sus hermanos: Fernando y Elisa Corona Riojas.
Diana Laura y Colosio se conocieron en la Universidad Anáhuac, en la Ciudad de México, donde ella estudiaba y él era profesor. En 1984 se casaron y un año después llegó su primogénito.
Aunque no está afiliado a Movimiento Ciudadano, Luis Donaldo es diputado del cuarto distrito de Nuevo León por este partido. Agradece la retroalimentación de las generaciones post Colosio, como él las llama, pues le permite hacer un juicio real de su trabajo.
“Tengo miedo a ser mediocre, a fallarme a mí mismo, a no cumplir con mis expectativas, a no dejar un buen papel”, responde al preguntarle si tuvo miedo de entrar a la política.
