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Paola Tabachnik, María Galindo y Cristina Rivero, además de ser emprendedoras, son mamás que les gusta crecer profesionalmente y, por ello, se asociaron para crear Co-Madre, un espacio en el que las mujeres pueden desarrollar sus empresas en un ambiente cómodo y seguro para sus hijos.
La idea surgió después de que Paola Tabachnik tuvo a su primer hijo. En ese momento, la empresaria trabajaba en una agencia de relaciones públicas, la que dejó tiempo después ya que sus multiples obligaciones como mamá le impidieron seguir trabajando.
Algunos días después, Paola Tabachnik se dio cuenta de que no podía dejar el trabajo al cien, por lo que surgió la idea de rentar una casa y construir una ludoteca para que, mientras ella atendía a sus clientes, su hijo pudiera divertirse. Así fue como rentó el primer espacio de Co-Madre con el apoyo de su esposo.
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La primera socia que se unió al proyecto fue Cristina Rivero, quien en ese momento estaba buscando una oficina cerca de las Lomas (ya que Cristina se dedica a la organización de eventos), entonces Paola le contó sobre el nuevo proyecto que acababa de emprender. Luego, se volvió socia de Co-Madre.
“Nos dimos cuenta de la magnitud del proyecto y de la forma en que estábamos ayudando a muchas mujeres” nos confesó Paola
Con el paso del tiempo, fue tal el alcance del proyecto que se vieron obligadas a ampliar el lugar y se mudaron a Montes Urales 455, en donde se encuentran actualmente. Cuando cambiaron de dirección, María Galindo contactó a Paola Tabachnik y a Cristina Rivero para decirles que les encantaba el concepto y que quería ser parte de la comunidad como socia.
Actualmente, Co-Madre está integrado por más de cien personas entre las que también se encuentran hombres, pues a pesar de que fue pensado originalmente para mamás, el lugar es incluyente. El único requisito que hay que cumplir para pertenecer a él es ser una mujer comprometida, así como pagar la anualidad que te vuelve socia exclusiva.
“Una vez que llegas aquí es porque eres una mujer comprometida que va a aportar. Una mujer que trae un proyecto con muchos intereses detrás” dijo María
De las mayores satisfacciones que Co-Madre le ha dado a Paola Tabachnik, María Galindo y Cristina Rivero, ha sido ver el crecimiento de las diferentes empresas que conforman el coworking, así como las fusiones que hay entre negocios para crear más proyectos.
Al preguntarles a las tres socias sobre cómo se imaginan a Co-Madre en cinco años, nos dijeron que esperan que la comunidad crezca, que estén por todos lados y convertirse en una referencia para las mujeres emprendedoras.
“Siendo una referencia de un espacio, no solo físico, sino de un comunidad de mujeres que se apoyan las unas a las otras” enfatizó Cristina