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De acuerdo con los reportes de la policía, la llamada al 911 se registró a las 9:43 de la mañana, la ambulancia llegó al lugar indicado pero el cantante ya había muerto y no pudo ser reanimado.
La leyenda de la música falleció a los 57 años siendo uno de los cantantes mejor pagados del mundo. Hace un par de años, una fuente anónima dio a conocer una lista de tarifas de grandes artistas proveniente de la agencia Degy Entertainment, que incluía el cobro por un show de Prince, el cual oscilaba entre 1 y 2 millones de dólares para territorio norteamericano y entre 2 y 4 millones para shows en el extranjero.
Prince debutó a los 18 años con su primer álbum y en julio de 1978 entró por primera vez en las listas estadounidenses de música soul con el tema Soft and wet. En noviembre del mismo año lanzó al mercado For you, del que vendió 300 mil copias.
Y si seguimos hablando de sus números, tenemos que recordar que en septiembre de 1992 firmó un contrato de 108 millones de dólares con la casa discográfica Warner, superando a Michael Jackson y Madonna.
La firma se comprometió a pagarle al cantante 60 millones de dólares por seis nuevos discos que tenía que sacar en seis años, y a invertir 48 millones para impulsar para impulsar su compañía discográfica Paisley Park.
Solamente en Estados Unidos vendió 39.5 millones de discos y cerca de 100 millones en todo el mundo; además de estas sumas, hay que considerar las regalías por los 39 materiales discográficos que realizó, muchos de ellos imprescindibles en la década de los 80.
Prince Rogers Nelson nació el 7 de junio de 1958 en Minneapolis, Minnesota. Su padre John L. Nelson formaba parte de un grupo de jazz llamado Prince Rogers Trio, gracias al cual conoció a Mattei Shaw, cantante del grupo con la que se casó y se convirtió en madre del cantante.
En la sangre traía el talento musical y buscó influencias en grandes artistas y bandas como Jimi Hendrix, The Jackson 5, Michael Jackson, Duke Ellington, Carlos Santana, James Brown, The Beatles, Queen y Led Zeppelin.
Murió consagrado como un ícono musical. ¡En paz descanse, Prince!