Abogada de Haya de Jordania propone app contra el matrimonio prematuro

La baronesa Shackleton, abogada de Haya, quiere ayudar a los jóvenes a cuestionarse si realmente quieren contraer matrimonio con sus parejas

(EFE/AP)
22/12/2020 14:49

Fiona Shackleton es una abogada de Reino Unido que es reconocida por su trabajo en el área de divorcios. Con 40 años de carrera ha representado a muchas figuras públicas que van desde a monarquía, con los casos del príncipe de Gales o la princesa Haya de Jordania, hasta la separación de celebridades, como el cantante Paul McCartney.

Y tras sus años de experiencia en el divorcio Shackleton tiene un nuevo objetivo: ayudar a adolescentes a decidir si realmente quieren contraer matrimonio. Para orientar a los jóvenes la abogada financió una investigación, cuya meta es utilizar la información obtenida para desarrollar una app para acercarse y orientar a aquellas personas que busquen contraer matrimonio, así como reducir la cifra de parejas que encuentran muchos problemas luego de su unión legal.

A los 64 años, la abogada que es reconocida en el área de divorcios patrocinó la investigación “Shackleton relationship Project” (Proyecto de relaciones de Shackleton) en la Universidad de Exeter, señala "The Times". Hasta el momento el proyecto ha arrojado dos principales causas en el fracaso de las relaciones entre personas jóvenes. La primera son las expectativas poco realistas y, la segunda, la incompatibilidad entre ambos.

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Abogada de Haya de Jordania propone app contra el matrimonio prematuro

(Fiona Shackleton y Paul McCartney / EFE)

Lo anterior encaja con la declaración que Shackleton agregó al medio sobre los casos que ha defendido en su trayectoria como abogada: “De todas las personas que he divorciado, más del 50% ha confesado que se han casado con las personas incorrectas. Ellos lo sabían justo antes de contraer matrimonio o cuando ya se habían casado o inmediatamente después que estaban cometiendo un error espantoso”, explicó. Leer también:

Se fomentaría el uso de la app en escuelas secundarias a través de varios módulos que se enseñarían en clases; lo que ayudaría a que los estudiantes puedan darse cuenta de los problemas que conlleva un matrimonio prematuro. Y con ello se les plantearían las preguntas “¿Queremos las mismas cosas en la vida?” y “¿Tenemos una base sólida de amistad?” Aunque más allá de comprobar la compatibilidad de las parejas el fin en sí mismo es ayudarles en el futuro: “si evitamos que dos personas que no deberían casarse lo hagan, entonces será dinero bien empleado y nos dejaría sin trabajo”, concluyó. Leer también: