Halagado pero molesto por el atropello, un instructor de manejo reveló que la cuenta de Instagram que tomaron los duques de Sussex era de su propiedad y que nadie de la realeza inglesa le pidió permiso para tomarla a favor de Harry y Meghan. El inglés Kevin Keiley usó @sussexroyal durante aproximadamente tres años porque apoya a Reading FC, apodado Royals, y vive en West Sussex.
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De acuerdo con la BBC, el afectado descubrió que Instagram había cambiado su identidad y dio el nombre a la pareja real sin preguntarle. Sin embargo, Instagram alega que tomaron esa decisión porque la cuenta estaba inactiva.
"Recibí un mensaje jokey de mi hijo que decía 'Ja, ja, veo que se te ha ido el control". "Pensé '¿De qué se trata todo eso?' Dijo 'Mira en Instagram', así que miré en Instagram y de repente mi control ya no era @sussexroyal, era @_sussexroyal_", reveló.
Sin embargo y pese a las modificaciones que su cuenta sufrió en Instagram, Kevin aún conserva su cuenta de Twitter con la identidad original.
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Hasta el momento, ni el príncipe Harry ni Meghan Markle han declarado algo al respecto.