Un entramado de luces blancas y de pendones de papel y un ambiente a media luz, tintado de destellantes estrellas plasmadas en artesanía metálica, fueron el marco perfecto para iniciar la velada que se convertiría en un encuentro con la nacionalidad, el espíritu de libertad y el sabor mexicano. La cita puntual con los asistentes para celebrar el 15 de septiembre sería en Zanaya, el restaurante que honra la cocina de la costa del Pacífico Mexicano en el Hotel Four Seasons de la Ciudad de México. La celebración cuenta también con la participación de Julio Uribe y su familia, dueños de la Hacienda Zotoluca, en Hidalgo.
Ahí, al comienzo de la zona de los grandes edificios en Paseo de la Reforma, en el hotel referente del lujo, a unos metros del monumento a la Independencia, entre los más de 100 comensales que asistieron, el ánimo estuvo por todo lo alto ya que se verían atuendos alusivos a la fecha patria: Adelitas, charros, caporales, tehuanas, bordados multicolores del sureste mexicano, atuendos acabados en hilo de oro y plata con rebozos en seda, charros con corbatines tricolores y sombreros con leyendas de Viva México así como mujeres con chalinas en rojo o verde, con vestidos blancos y trenzas en la misma sintonía, así como joyería en oro y plata.
Esa sería la temática para cumplir con el dress code para degustar un menú creado exprofeso para la celebración por Jesús Pastor, chef ejecutivo del Hotel Four Seasons.
Los invitados llegaron al área de la barra para disfrutar de los cocteles de bienvenida que el tequila Reserva de la Familia presentó recientemente en Millesime y en la entrega de Estrellas Michelin en México, a la par que clientes y amigos disfrutaban de la hospitalidad de los anfitriones.
Al arribar a su mesa, los comensales descubrieron un menú de cuatro tiempos entre adornos florales de rosas, el cual tendría una entrada de Atún al pastor, con tortilla de maíz blanco, hoja santa y piña, con matices de chile habanero. Un primer tiempo de Crema de huitlacoche, chochoyotes de maíz azul, mole rojo con queso menonita y elotes tiernos. Como segundo tiempo, degustaron la Costilla de res braseada a baja temperatura, chichilo negro, plátano macho y verdolagas tiernas.
El plato fuerte fue la Cabrilla zarandeada, puré de tomatillo y cilantro criollo servido mientras en el tablado frente al jardín central del Four Seasons, se ejecutaban bailes regionales ejecutados por el Ballet de Amalia Hernández.
Entre aplausos y rostros sonrientes, los asistentes degustaron un postre con acentos nacionales: Flauta dulce de maíz, relleno con mousse de queso de cabra y salsa de rompope, en sintonía con un coctel de maíz realizado por el mixólogo Juan Gutiérrez Contreras.
La Cena de Independencia llegó a su fin después de dar el grito, la celebración más mexicana.