Casa Orendain celebró un siglo de tradición tequilera con el lanzamiento de Orendain 100, un tequila doblemente destilado que exalta la pureza del agave cocido y ofrece un perfil robusto y complejo.
Para honrar esta herencia, Juan Pablo Orendain convocó a una íntima cata guiada por la tequilier Elizabeth Tovar, quien reveló las armonías gastronómicas de sus tres ediciones: Blanco, ideal con mariscos; Cristalino, perfecto para carnes especiadas; y Reposado, cómplice de postres, especialmente los realizados con chocolate.
La historia de Casa Orendain se remonta a 1926, cuando Don Eduardo Orendain González convirtió su visión en una misión de vida: hacer del tequila un símbolo de identidad nacional.
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Su legado no solo se expresa en cada botella, sino también en su papel como fundador y primer presidente de la Cámara Nacional de la Industria Tequilera, donde impulsó la protección de la denominación de origen y el reconocimiento global del tequila como embajador de México.
Tras la cata, los invitados —entre ellos Emmanuel Caurel, Julien Bizarre, Carlos Girón, Vania Niño de Rivera, Alexa Alemán, Raúl Albarrán y Rodrigo Castelazo—se sumaron a una experiencia de mixología en Bodegas Alianza, en Las Lomas, donde el mixólogo Christian Osorio los guio en la creación del cocktail Crystal Rush, con Orendain Cristalino y frutos rojos.
En Tequila, Jalisco, el agave crece en suelos volcánicos que le aportan un perfil mineral distintivo. Orendain 100 refleja esta calidad y resume cien años de tradición tequilera con una propuesta que combina herencia y evolución.
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